Su verdadero nombre en arabe es Raks Sharki y su significado es danza oriental o danza del medio oriente. El Raks Sharki, tal y como lo conocemos hoy, proviene de egipto.
Si hablamos de su verdadero origen, seríamos incapaces de probar de dónde proviene esta maravillosa danza. Quizás no lo sabremos nunca, sólo documentar su historia reciente parece una tarea imposible, porque tendríamos que filtrar los prejuicios de quienes escribieron sobre ella durante los tres pasados siglos, juzgando lo que iba contra su propia estética y sus prejuicios.
Las presiones sociales hacían que este tipo de bailes no estuvieran bien vistos, sobre todo porque se percibía como un canto a la libertad sexual, que ya no se correspondía con el papel de las mujeres en estas sociedades. Pero hay que decir que hay una amplísima área que tiene bailes con muchos puntos en común con la danza oriental. Se extiende desde India hasta Marruecos, abarca la mitad oeste de la ruta de la seda, la cuenca mediterránea, e incluso Europa del este y el sur de la ex unión soviética.
Aunque no sabemos con certeza cómo eran las danzas en la antigüedad, hay muchos estudios sobre la religión antigua que han aportado testimonios gráficos de la danza.
No obstante, en las figuras humanas que se encuentran en restos de cerámica antigua, templos y estatuillas (algunas de las cuales, diminutas de hace más de 6000 años) están sugeridos con movimientos básicos en danza oriental/danza del vientre, como son los arcos, infinitos y espirales dibujados con el torso y extremidades.
En la antigüedad, las mujeres tenían un papel muy importante en la sociedad, ya que eran las que daban a luz y alimentaban a los recién nacidos. Por ello, era lógico pensar que si eran las únicas que tenían el poder de reproducir, se creyera que la magia fluyera por sus venas.
Muchas religiones antiguas están repletas de diosas madres, capaces de dar y quitar la vida, y de las que proviene el alimento de la humanidad, porque estas diosas se enamoraban, perdían a sus amados, tenían hijos, se enfrentaban a los enemigos y a la muerte…
Las mujeres realizaban danzas rituales en honor a estos poderes y ceremonias relacionadas con la fertilidad, como en la antigua Grecia y Roma. Eran danzas basadas en la rotación de las caderas y vientre. Algunas de ellas se realizaban en
honor a las diosas. Muchas de estas divinidades provenían del este, en particular de Siria y Turquía. En Chipre, Afrodita, la diosa griega del amor y la fertilidad, era venerada por las mujeres quienes realizaban danzas rituales acompañadas de cantos y percusión mediante las cuales se ponían en trance. Esto les permitía entrar en contacto con la diosa y recibir sus enseñanzas, guía y poder.
La danza estaba muy influenciada por la religión. Al expandirse el Islam, se enriquece recibiendo influencias de las distintas regiones, como Irán y Turquía, Magreb y Alandalus, por lo que se le concede un nuevo reconocimiento al considerarse un arte más, junto a la poesía la música y la pintura.
En el siglo XIII, se radicaliza el Islam y empieza su declive. En el siglo XVI, la danza del vientre empieza a bailarse en lugares de dudosa reputación. Entre los siglos XVIII y XIX, sólo bailan en público los hombres, disfrazados de mujer. En el siglo XIX, hay dos tipos de bailarinas, las gawazzy (gitanas) y las awalim. Badia Masabri (libanesa) abre en 1.930 –en algunos sitios se habla de 1926- el Café Badia en El Cairo. Esto revoluciona la danza egipcia.
Tanto las gawazzy como las awalim bailaban en pequeños sitios (en un corrillo en la calle, en el interior de una casa, en una reunión familiar…) y en Café Badia se empieza a adaptar las coreografías a escenarios grandes donde se pueden realizar desplazamientos, vueltas, giros…
Se solía bailar en grupo, pero empiezan a destacar algunas componentes de los grupos empezando a bailar en solitario dando mas libertad a la coreografía (improvisación). Algunas de las figuras más conocidas que salieron de Café Badia fueron Tahia Carioca, Samia Gamal… Parece ser que el termino Danza del Vientre se popularizó en Francia en un intento por definir lo que hacía una argelina que bailó en la Feria Internacional de Chicago en 1.888.